1074 Hablemos de los precios de tus servicios.


Suscribite para escuchar Marketing para gente como uno en: IVOOX | Spotify | Google podcast | Apple podcast 

Hoy vengo a hablarte de precios. A darte una serie de consejos y sugerencias para que puedas mejorar tu estrategia de precios si te dedicás a ofrecer servicios de forma profesional. Ponerle un número a nuestros honorarios a veces cuesta pero como todo en la vida, es cuestión de conocimientos y práctica.

Bienvenid@s a otro episodio.

Bienvenida y bienvenido a marketing para gente como uno.

Soy Carlos Malfatti, Consultor de Marketing y nos encontramos otra vez para hablar de Marketing, Emprendimiento, Redes Sociales, Contenidos, Publicidad y todo lo que tenés que saber para llegar a más personas, captar más clientes y vender más en internet.

Sugerencias para que mejores tu estrategia de precios.

Vengo con consejos y sugerencias para que puedas mejorar tu estrategia de precios si te dedicas a ofrecer servicios de forma profesional.
Gracias por acompañarme un día más hoy es miércoles 28 de septiembre de 2022 estamos en el episodio 1074 y el tema de hoy es los precios de tus servicios. Una especie de compilado que armé para vos con ciertos tips y sugerencias que seguro te van a ser útiles.

Imagino que si estás empezando se te complica bastante esto de poner precios a tus servicios. See, es un asunto «peliagudo» cuando uno arranca.

Por eso, hoy te traigo uno 13 puntos o sugerencias que te van a servir de guía.

13 Tips para definir los precios de tus servicios.

1 Los precios de referencia.

Hay precios de referencia y está bueno prestarles atención, pero tomalos como lo que son: una referencia. No hay precios únicos y definitivos para todo el mundo. Cada profesional tiene su propio contexto y lo que cobra Juan puede estar bien para Juan pero ser poco para Laura, etc.
Por eso no me gustas los tarifarios (hice un episodio al respecto) y no aconsejo que tu estrategia de precios se apoye en lo que alguien dice por ahí que hay que cobrar.

Si tenés dudas respecto al valor de tus servicios está bien mirar al mercado para detectar precios mínimos y máximos de colegas y competidores, pero tomar los mismos apenas como un rango de valores de referencia para no irte ni «muy arriba» ni quedarte «muy abajo».
Aprovechá estas referencias hasta que lo puedas hacer mejor.

2 El precio y el valor.

Una cosa es precio y otra es valor.

Vos ponés el precio de tus servicios, pero el valor de los mismos habita en las cabezas de tus posibles clientes. Por eso es tan importante el marketing y la comunicación.

Vos, confiando en el valor de lo que ofrecés, podés definir un precio, pero si con tu comunicación llegás a un posible cliente que no tiene ni idea de lo que hacés y del valor que aportás cualquier precio le va a parecer caro.

Al contrario, si llegás a un cliente ideal que sabe el valor de tu propuesta pagará gustosamente a tal punto que llegando a los clientes correctos vas a poder cobrar mas que tu competencia.

Ejemplo: al momento de escribir estas líneas llevo caso 4 años y miles de episodios hablando de marketing digital.
Los posibles clientes que llegan a mi negocio a partir del podcast ya saben el valor de lo que ofrezco, esto me posiciona por encima de muchos de mis competidores.

3 El precio sirve para filtrar.

El precio te ayuda a «sacarte de encima» a quienes no ven valor en tu propuesta. Hay quienes no ponen precio por miedo no conseguir clientes y esto es una pésima estrategia.

Al contrario, tenés que poner tus precios de forma publico para que te llegue un cliente que esté a la altura de tu calidad y del valor que ofreces. Si publicás tus precios, quien viene buscando «algo barato» va a pasar de largo.

4 El precio es parte de tu marketing, te posiciona.

El precio de tus servicios es fundamental como parte de tu marketing porque sirve para posicionarte.

Hace varias décadas aquí en Argentina una marca de televisores salió al mercado con un slogan que decía «Caro, pero el mejor».
Se cansaron de vender televisores dado que se posicionaron como el mejor televisor y eso les sirvió para justificar sus precios. Una genialidad. Pasaron como 40 años y todavía me acuerdo de sus avisos.

También ocurre lo contrario. Si cobrás por debajo de los precios de mercado vas a quedar como la opción «barata» incluso habrá gente que va a desconfiar por el bajo precio de tus servicios.

5 Tus precios deben estar justificados.

Cuando hablo de justificar no hablo de justificarte ante el cliente, pedirle permiso o perdon por cobrár lo que cobrás (en este episodio te lo explico con más detalle).

Me refiero a tener espaldas anchas, de apoyarte en una serie de elementos y características de tu negocio y servicios que fundamenten tus precios.

Si vas a Starbucks y te cobran 5 dólares un café lo pagás sin chistar, porque reconocés que ese precio se justifica en la experiencia que te brinda esa marca.

En cambio, si vas al café de la esquina de tu casa, que es un mamarracho y te quieren cobrar 5 dólares te vas a otro lado sin pensarlo dos veces ¿Por qué? Porque comparás una experiencia de calidad con otra que no la tiene. En el segundo caso no pueden justificar el precio.

Cuando hablo de justificación hablo de que se note el valor y otros aspectos positivos de tus servicios de forma que tus clientes paguen sin dudar.

6 Si no quieren pagarte no son tus clientes.

Esto te lo tenés que grabar a fuego.

Si alguien no te quiere pagar no es tu cliente. No insistas.
En última instancia analizá en qué está fallando tu marketing y comunicación.
Puede que no estés transmitiendo debidamente el valor de tu propuesta o tal vez estás llegando con la propuesta adecuada a la persona incorrecta.

Cuando alguien no te quiere pagar es porque no ve tu valor. Bueno… también puede ser garca… pero eso es otro tema jeje.

7 Si te pagan sin chistar, estás cobrando barato.

Ahora lo contrario si te pagan sin chistar ¡Atenti! Tal vez estés cobrando barato.
Por ejemplo si diseñás páginas web y un cliente, otro, otro y luego otro te pagan felices sin cuestionar, sin hablar de precio y ni siquiera les tiembla el pulso .. hummm… tal vez estés dando más valor del que recibís.
Así que ¡Atención con esto!

8 Conviene cobrar menos a bajar precios.

Si estás comenzando con tu emprendimiento de servicios te sugiero ir de a poco con tus precios. Ir poquito a poquito acomodándote a un precio que te resulte cómodo. Siempre es mejor cobrar menos que tener que bajar los precios.

Es una mala idea empezar con un precio y luego bajarlo por miedo a no conseguir clientes cuando en realidad el asunto tal vez tenga más que ver con tu marketing que con tu precio.

Si bajas tus precios las dudas sobre la calidad de lo que ofreces te van a asaltar. No te lo recomiendo. En todo caso, ofrecé un adicional, quedate en el precio que definiste y añadí algo de valor. De esta forma ganás vos y gana tu cliente.

9 En vez de descuentos ofrecé facilidades de pago.

Otra sugerencia es que en vez de ofrecer descuentos o rebajas des a tus posibles clientes facilidades de pago.

Imaginate que tu servicio cuesta 300 y tu posible cliente te dice que no lo puede pagar pero muestra interés.
En ese caso ofrecé la posibilidad de abonar ese importe en 2 o 3 pagos.

11 Separá tus honorarios de los costos.

Cuando el servicio que ofrecés incluya costos (como por ejemplo el precio de una herramienta) mencionalo con claridad, que no queden dudas. De este modo te vas a ahorrar posibles problemas posteriores.

Por ejemplo. Supongamos que ofrecés un servicio de publicidad digital. Indicá a tu cliente el importe de tus honorarios profesionales y aclara que el dinero a invertir en publicidad es aparte y corre por su cuenta.

12 Si no podés definir un precio hablá de rangos.

Cuando el servicio que ofrecés se puede «paquetizar» como por ejemplo el diseño de la portada de una revista, una hora de consultoría online o una sesión de fotos de una hora en tu atelier es sencillo tener un precio definido.

En cambio el diseño de un sitio web, las campañas publicitarias online o un servicio de community manager depende de los requerimientos de cada cliente. En estos casos podés publicar tus precios indicando un rango como por ejemplo «entre 10 y 20» o «a partir de X».
Es un modo de aprovechar el precio para posicionarte y filtrar sin que tengas que dar un número exacto.

10 Aprender a poner precios lleva tiempo. Paciencia.

Por último. Aprender a poner precios lleva tiempo.

Requiere incorporar lo de valor, lo de la diferenciación, sacarnos de encima el síndrome del impostor, dejar de pensar en la escasez y el miedo a perder clientes o a no conseguir los suficientes, etc.
Todo esto es un proceso, un camino que vas a recorrer así que ¡Paciencia!

Lo más importante. Lo crucial es que aprendas que tus honorarios profesionales nunca deben ser el resultado de ver lo que cobra el otro y copiarlo o algo peor, cobrar menos para «robarle» el cliente.

¿Querés vender más?

Si querés vender más puedo ayudarte.
¿Qué te parece si hacemos una consultoría por videollamada?

  1. reservás tu lugar.
  2. nos conectamos.
  3. me contás sobre tu negocio
  4. y te asesoro para que mejores tu marketing, contenidos, publicidad o lo que necesites.

¡Deja de perder tiempo, dinero y energía en acciones que no te dan resultados!
Empezá a vender con estrategias, metodologías, contenidos y publicidad.

Escribime y reservá ya mismo tu lugar.