1149 Veda de capacitación: menos aprender y más hacer.


Escuchá Marketing para gente como uno en >>> IVOOX | Spotify | Google | Apple 

Soy un convencido de la importancia de la capacitación permanente en el mundo de hoy. Sin embargo, cuando la capacitación es una excusa que te frena por tus miedos o por el síndrome del impostor termina siendo algo negativo. Por eso, en este episodio, te propongo que hagas una «veda de capacitación”

Bienvenid@s a otro episodio.

Bienvenida y bienvenido a marketing para gente como uno.

Soy Carlos Malfatti, Consultor de Marketing y nos encontramos otra vez para hablar de Marketing, Emprendimiento, Redes Sociales, Contenidos, Publicidad y todo lo que tenés que saber para llegar a más personas, captar más clientes y vender más en internet.

Hay quienes invierten demasiado en capacitación.

Resulta que hay personas que invierten mucho en capacitación (y no hablo de dinero, hablo principalmente de tiempo).

La capacitación, como bien lo dije al comienzo del episodio en la introducción, es importante, pero a veces esconde algo negativo.

La capacitación como excusa.

Sí, a veces muchas personas utilizan la capacitación como una excusa, como una excusa para no avanzar, como una excusa para no afrontar sus miedos.

¿Qué miedos? Por ejemplo, el temor a no saber lo suficiente, el llamado síndrome del impostor.

  • «Necesito seguir aprendiendo porque siento que sé muy poco de esto»,
  • «que no puedo crear un curso»,
  • «que no puedo atender a un cliente»,
  • «que no puedo diseñar mi sitio web»,
  • «que no puedo escribir los textos de mi carta de venta o de mis productos porque me falta aprender».
  • «Necesito buscar en internet y seguir aprendiendo porque esto veo que es poco y veo que hay gente que lo hace mejor que yo»

Entonces, me trabo y sigo, sigo, sigo aprendiendo y jamás me pongo en acción. Estoy siempre en la etapa del aprendizaje.

La capacitación y el perfeccionismo.

La otra cara, o algo que en realidad es bastante parecido, es el perfeccionismo.

Sabemos que el perfeccionismo es muchas veces la gran excusa de emprendedores y emprendedoras.

Resulta que esto se puede hacer mejor y entonces lo quiero hacer mejor, lo quiero hacer casi perfecto y jamás arrancas.

Lo que te cuento también me pasó.

Y esto que te estoy contando no me es ajeno.

Yo, cuando arranqué, también pasé por esto.

A mí también me ocurrió lo de capacitarme, te diría en algún punto demasiado, o de postergar las cosas porque no estaba seguro de que las cosas estuvieran bien.

Lo expliqué con el podcast, de haber grabado como treinta y pico episodios, borrarlos todos y empezar a grabar de nuevo porque no me gustaban, y haber demorado un año este podcast.

Podría tener cinco años en vez de cuatro si yo me hubiese animado y no hubiera puesto excusas, o no hubiera sido tan perfeccionista, o no hubiera sentido que me faltaban conocimientos para hacerlo.

Hay que capacitarse en forma permanente pero aplicar lo que se aprende.

Entonces, a esto me refiero: la capacitación debe ser permanente, por supuesto, porque todo cambia, y yo soy un defensor de que hay que capacitarse de forma permanente, porque de lo contrario te quedas, te quedas con información vieja, tus competidores te pasan como alambre caído, y además está bueno también para la cabeza, para el cerebro, estar activo y aprendiendo cosas.

Pero esta capacitación es positiva siempre y cuando complemente a la acción, porque capacitarte para luego no hacer nada no tiene el menor sentido. Al contrario, termina perjudicando.

Si esta capacitación se convierte en una barrera en el medio de tu camino que te frena, bueno, entonces más vale deja de capacitarte.

¿Cómo saber si estás usando de excusa la falta de conocimientos?

¿Cómo darte cuenta que estás usando la falta de conocimientos como excusa?

  • Bueno, básicamente una de las claves, te diría, cuando no avanzás proyectos esperando a saber un poco más,
  • o cuando querés hacer algo demasiado complejo. Imaginate que tenés que hacer tu sitio web, pero en vez de hacer un sitio web sencillo (como para salir vendiendo lo más rápido posible o para poner ahí tus productos, tus servicios). En vez de hacerlo simple, querés una súper página web con automatizaciones, con chatbot, con esto, con el otro, con lo de más allá, y terminás buscando en internet mucha información, tratando de aprender un montón de cosas que en ese momento no son necesarias, y casi te diría que en la mayoría de los casos jamás son necesarias, porque si vos querés diseñar tu propia página web para ofrecer tus servicios, pero tus servicios no son de diseño web, listo, hacé algo sencillo. Ahora, si vos vendés diseño web y querés una súper página para que todos digan «Ah, mirá la zarpada página que hace este tipo», bueno, lo puedo llegar a entender, o para adquirir los conocimientos a fin de luego brindarles a los clientes, lo puedo llegar a entender, pero de lo contrario es una pérdida de tiempo. ¿Por qué? Porque jamás lanzás el sitio web.
  • Lo mismo pasa con otras cuestiones, como por ejemplo diseñar el logo de tu negocio. Si hacés tres cursos de branding, te mirás 20 vídeos de YouTube o seguís un canal de un tipo que se dedica al diseño. Te ponés a mirarlo, de la psicología del color, lo de las tipografías, o cuestiones que no les quito su importancia o su razón de ser, pero vos necesitás un logo rápido para tu negocio, que va a ser apenas una parte del engranaje, apenas una pieza. Vos no tenés un estudio de branding que tenés que asesorar, no sé, Abu Dhabi para su marca país. No, tenés que hacer un logo sencillo para tu negocio. Entonces, no pierdas tiempo. Esta es la idea.

Cuando empecé invertí (demasiado) en capacitación.

En mi caso, cuando empecé, seguía decenas de podcast, canales de YouTube, estaba suscrito a una veintena de newsletter, y compré cursos y más cursos.

No estoy diciendo que no me sirviera todo este conocimiento que fui adquiriendo, porque gracias a esto aprendí un montón, pero creo también que en algunos momentos hubiese aprendido mucho más si aplicaba, y si me equivocaba, en vez de mirar cinco cursos distintos sobre uno.

Hubiera aplicado lo que aprendí en un curso complementado con otros, y a partir de la experiencia ir modificando esto.

Reduje mi capacitación cuando comencé a tener más confianza en mis conocimientos.

Por supuesto, comenzó a mejorar cuando me di cuenta de que estaba invirtiendo un tiempo precioso, y en algunos casos dilapidándolo, y comencé a tener más confianza en mí mismo, en mis conocimientos, en mi poca experiencia allá cuando arranqué, y mi criterio, y ahí me fue mucho mejor.

Ahora solamente sigo a un puñado de personas, y hago algunos cursos sobre lo que necesito o cuando necesito actualizaciones.

Gracias a esto, a recortar, gané un montón de tiempo, y ese tiempo lo uso para mis proyectos o para el ocio, para el descanso.

Dejá de capacitarte al menos por un mes.

Entonces, para ir finalizando, tarea para el hogar. Te voy a decir o te voy a pedir o sugerir que cortes por lo sano, una solución que es radical: deja de capacitarte por al menos un mes.

Con un mes, creo que suficiente. Dejá de consumir los contenidos que consumís, y durante ese mes, animate a confiar en los conocimientos que ya tenés.

De última, si no querés que sea tan extremo, bueno, tomás todos los vídeos que ves, o todas las personas que seguís, todos los podcast que escuchabas, todas las newsletter, todo, no sé qué, y hacés una selección, y te quedás con uno de cada uno, y a partir de ahí, y durante este periodo de un mes, vas a aplicar todos tus conocimientos para avanzar los proyectos que están en marcha o que ni siquiera se iniciaron, y te vas a dar cuenta, te vas a dar cuenta que sabés lo suficiente, quizá no para hacer una experta, un experto, pero sí para valerte por vos misma o por vos mismo.

Y esto te lo digo porque lo pasé. Así que no estoy inventando nada.

Todos aquellos recursos que hoy día estás consumiendo porque sentís que te falta aprender un poquito para hacer determinadas cosas, cortá los de raíz, y ponete a hacer, ponete a hacer, y vas a ver que la mayoría de eso no lo necesitabas.

En fin, esto ha sido todo por hoy, también por mañana porque es sábado, desenchúfate, descansá, pasá lo lindo, que el lunes nos volvemos a encontrar. Chau chau.

¿Querés vender más?

Si querés vender más puedo ayudarte.
¿Qué te parece si hacemos una consultoría por videollamada?

  1. reservás tu lugar.
  2. nos conectamos.
  3. me contás sobre tu negocio
  4. y te asesoro para que mejores tu marketing, contenidos, publicidad o lo que necesites.

¡Deja de perder tiempo, dinero y energía en acciones que no te dan resultados!
Empezá a vender con estrategias, metodologías, contenidos y publicidad.

Escribime y reservá ya mismo tu lugar.